Apocalipsis 18:9 Y la llorarán y se lamentarán sobre ella los reyes de la tierra, los cuales han fornicado con ella y han vivido en deleites, cuando ellos vieren el humo de su incendio,
10 Estando lejos por el temor de su tormento, diciendo: ¡Ay, ay, de aquella gran ciudad de Babilonia, aquella fuerte ciudad; porque en una hora vino tu juicio!
11 Y los mercaderes de la tierra lloran y se lamentan sobre ella; porque ninguno compra más sus mercaderías:
Los mercaderes de la tierra lloran y se lamentan sobre ella-
Aquellos que se beneficiaron con Babilonia, los hombres que se enriquecieron y se deleitaron con los tesoros y los frutos de la iniquidad, los que sacaron provecho de los entancamientos de esa gran ciudad que se embriagó con la sangre de los santos, lamentarán su fin porque la verán destruida así como fueron destruidas Sodoma y Gomorra y sus ciudades vecinas. Cuando en una sola hora vengan los castigos a 'Babilonia' quienes más se han lucrado y gozado con ella, se pararán de lejos tratando de negar su vinculación con ella, horrorizados.
Jeremías 50.46 Al grito de Babilonia la tierra tembló, y el clamor se oyó entre las naciones.
De Tiro la ciudad comerciante por excelencia, hecha parte del imperio de Babilonia [fue asediada y capturada por Nabucodonosor]; Dice Ezequiel:
Ezequiel 27. 30,31 Y hará oír su voz sobre ti [los comerciantes del mar], y gritarán amargamente, y echarán polvo sobre sus cabezas, y se revolcaran en ceniza.
Se raerán por ti los cabellos, se ceñirán de cilicio, y endecharán por ti endechas amargas, con amargura del alma.
Apocalipsis 18:12 La mercadería de oro, de plata, de piedras preciosas, de perlas, y de lino fino, de púrpura, de seda, de escarlata, de toda madera olorosa, de todo objeto de marfil, y de todo objeto de madera preciosa, de cobre, de hierro, y de mármol;
13 y canela, especias aromáticas, incienso, mirra, olíbano, vino, aceite, flor de harina, trigo, bestias, ovejas, caballos y carros, y esclavos, almas de hombres.
14 Los frutos codiciados por tu alma se apartaron de ti; y todas las cosas exquisitas y espléndidas te han faltado; y nunca más las hallarás.
Toda la mercadería, todo el sustento y la riqueza de Babilonia, la lujuria y los trofeos que ofrece desaparecerán de ella, y nunca más los tendrá, pues su destrucción es con fuego, principalmente sometida al juicio poderoso de Yeshúa haMashíaj.
Ezequiel en la profecía contra Tiro – ciudad caída en manos de Babilonia -, también dice:
Ezequiel 27. 12,13 Tarsis [naciones de alta mar] comerciaba contigo por la abundancia de todas tus riquezas; con plata, hierro, estaño y plomo comerciaba en tus ferias.
Javán, Tubal y Mesec comerciaban también contigo; con hombres y con utensilios de bronce comerciaban en tus ferias.
El amor a estas riquezas y de su comercio para enseñorearse sobre las naciones, marca la destrucción de Babilonia.
1 Timoteo 6.9,10 Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición; porque la raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, fueron traspasados por muchos dolores.
Apocalipsis 18:15 Los mercaderes de estas cosas, que se han enriquecido a costa de ella, se pararán lejos por el temor de su tormento, llorando y lamentando,
16 Y diciendo: ¡Ay, ay, de la gran ciudad, que estaba vestida de lino fino, de púrpura y de escarlata, y estaba adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas!
17 Porque, en una hora han sido consumidas tantas riquezas! Y todo piloto, y todos los que viajan en naves, y marineros, y todos los que trabajan en el mar, se pararon lejos;
18 y viendo el humo de su incendio, dieron voces, diciendo: ¿Qué ciudad era semejante a esta gran ciudad?
19 Y echaron polvo sobre sus cabezas; y dieron voces, llorando y lamentando, diciendo: ¡Ay, ay, de la gran ciudad, en la cual todos los que tenían naves en el mar se habían enriquecido de sus riquezas, pues en una hora ha sido desolada!
En una hora son destruidas las riquezas de Babilonia. Todos sus tesoros son consumidos en el ardiente juicio que establece sobre ella Yeshúa haMashíaj. Quienes comerciaron y se enriquecieron a la manera de Babilonia, ven en tan poco tiempo la destrucción de sus pertenencias.
Desolada y viuda Babilonia, porque no habrá quien la defienda. Los que se enriquecieron a costo de ella, se paran “lejos por el temor de su tormento.”
Se habla de los comerciantes del mar, “todos los que trabajan en el mar”, haciéndose referencia también a la Babilonia establecida en los otros mundos contaminados del Celeste.
Lamentación de los Kosmócratas -la 'cola' del dradón- al ver a Babilonia destruida en la Tierra, llorando porque la gran ciudad a sido desolada, solo verán el humear de sus riquezas consumidas.
Isaías 23.14 Aullad, naves de Tarsis [naves de alta mar], porque destruida es vuestra fortaleza.
Ezequiel 27.25 Las naves de Tarsis eran como tus caravanas que traían tus mercancías; así llegaste a ser opulenta, te multiplicaste en gran manera en medio de los mares.
Todas las riquezas de Babilonia son consumidas por lo cual lloran y se lamentan sus comerciantes.
Apocalipsis 18:20 Alégrate sobre ella, cielo, y vosotros, santos, apóstoles, y profetas; porque Dios ha hecho justicia en ella.
Las riquezas de Babilonia fueron acumuladas para la iniquidad, los inicuos se enriquecieron tomando para sí las prerrogativas de los Santos. Con la destrucción de Babilonia Dios hace justicia y por ello hay alegría en los cielos, donde también hizo estragos esta gran ciudad.
Apocalipsis 18:21 Y un ángel poderoso tomó una piedra, como una gran piedra de molino, y la arrojó en el mar, diciendo: Con el mismo ímpetu será derribada Babilonia, la gran ciudad, y nunca más será hallada.
La arrojó en el mar-
En la misma forma será consumida la Babilonia del celeste contaminado –‘el mar’ -.
Ezequiel 27.27 Tus riquezas, tus mercancías, tu tráfico, tus remeros, tus pilotos, tus calafateadores y los agentes de tus negocios, todos tus hombres de guerra que hay en ti, con toda tu compañía que en medio de ti se halla, caerán en medio de los mares el día de tu caída.
Jeremías 51.62-64 Dirás: oh Jehová, tú has dicho contra este lugar que lo habías de destruir, hasta no quedar en él morador, ni hombre ni animal sino que para siempre a de ser asolado.
Y cuando acabes de leer este libro, le atarás a una
piedra, y lo echarás en medio del Éufrates, y dirás: Así se hundirá Babilonia, y no se levantará del mal que yo traigo sobre ella; y serán rendidos…
Estas fueron indicaciones de Jeremías a Seraías anunciando el fin de la Babilonia de Nabucodonosor; en Apocalipsis el ángel poderoso arroja la gran piedra al mar anunciando el fin de la Babilonia establecida en el celeste.
Apocalipsis 18:22 Y voz de arpistas, de músicos, de flautistas y de trompeteros, no oirá más en ti; y ningún artífice de oficio alguno, se hallará más en ti; ni ruido de molino se oirá más en ti.
23 Luz de lámpara no alumbrará más en ti; ni voz de esposo y de esposa se oirá más en ti: porque tus mercaderes eran los grandes de la tierra, pues por tus hechicerías fueron engañadas todas las naciones.
24 Y en ella se halló la sangre de los profetas y de los santos, y de todos los que han sido muertos en la tierra.
En el final de la gran tribulación Babilonia [la cultura anticristiana] es reducida a escombros por los ejércitos del Santo Señor Yeshúa. Babilonia llega a ser un lugar devastado y nunca más tendrá moradores.
Ezequiel 26.13,14 Y haré cesar el estrépito de tus canciones, y no se oirá más él son de tus cítaras.
Y te pondré como una peña lisa; tendedero de redes será, y nunca más serás edificada; porque yo Jehová he hablado, dice Jehová el Señor.
Jeremías anunciando el territorio que será puesto en ruinas por el ejército ejecutor de los planes de Dios:
Jeremías 25.10 Y haré que desaparezca de entre ellos la voz del gozo y la voz de alegría, la voz de desposado y la voz de desposada, ruido de molino y luz de lámpara.
Jeremías 51.48,49 Los cielos y la tierra y todo lo que está en ellos cantarán de gozo sobre Babilonia; porque del norte vendrán contra ella destruidores, dice Jehová. Por los muertos de Israel caerá Babilonia, como por Babilonia cayeron los muertos de la tierra.
SHALOM
