TEMA:
LA INIQUIDAD ES CAUSA DE RUINA, POBREZA Y ESCASES
Cuando la iniquidad se incubo en el corazón de Satanás a causa de su hermosura y esplendor, por el poder de sus tesoros, el enfoque santo se corrompió. A partir de ese momento, un pensamiento torcido de soberbia y autosuficiencia, lo convenció de poder llegar a ser igual a Dios. Este mismo pensamiento es la semilla diabólica y torcida que Satanás ha sembrado en el corazón del hombre. Este es el ADN de maldad que nos arrastra a buscar más el oro que la misma presencia de Dios.
Cuando pensamos que nuestras posesiones, nuestro sueldo o nuestro negocio con nuestra fuente de seguridad y no Dios, hemos caído en las mismas contrataciones que hicieron caer a Luzbel.
“A causa de la multitud de tus contrataciones fuiste lleno de iniquidad, y pecaste”,… “Se enalteció tu corazón a causa de tu hermosura, corrompiste tu sabiduría a causa de tu esplendor”. Ezequiel 28.16 y 17
Lo que la biblia quiere enseñarnos es que por la abundancia de riquezas y capacidad comercial, Satanás se lleno de maldad hasta el punto de llegar a creer que él era su propio fuente de provisión.
Cuando confiamos más en nuestras riquezas que en nuestro Dios, y cuando creemos que nuestra paz, felicidad y santidad dependen de nuestra estabilidad económica, inmediatamente quedamos contaminados de iniquidad.
“Los que confían en sus bienes y de la muchedumbre de sus riquezas se jactan…Este su camino es locura; con todo sus descendientes se complacen en el dicho de ellos. Como a rebaños son conducidos al seol, LA MUERTE LOS PASTOREARA”. Salmo 49.5,6 y 13-15
El refugiarse en el dinero y creer que la estabilidad financiera es la fuente de nuestra paz, es hacer un pacto con la muerte. Es por esto que la mayor cantidad de dinero en el mundo, es invertido en guerras con sus carreras armamentistas, drogas que secretamente tienen pacto con la muerte, y en perversión sexual que es lo que más se vende en los medios de comunicación.
“Raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores”. 1 TIMOTEO 6:10
En este versículo, la palabra “amor” traduce “adoracion”, es decir idolatría al dinero. Es por esto que el SEÑOR queriéndonos bendecir, nos advierte primero que :SI SE AUMENTAN LAS RIQUEZAS,NO PONGAS EL CORAZON EN ELLAS.” SALMO 62:10
El diablo ha tendido vendas mágicas para engañar la humanidad haciendo que robe a Dios al no llevar al alfolí los diezmos y las ofrendas. De esta forma quedan bajo el juicio de Dios y experimentan maldiciones de ruina y miseria generacional.
¿Robara el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En vuestros diezmos y ofrendas. “malditos sois con maldición, porque vosotros, la nación toda, me habéis robado”.
Malaquías 3.9 y 10
“Por tanto yo juzgare a cada uno según sus caminos, oh casa de Israel, dice Jehová el Señor. Convertíos y apartaos de todas vuestras transgresiones y no os será la INIQUIDAD CAUSA DE RUINA” Ezequiel 18.30
LA INIQUIDAD CORRONPE NUESTRA LENGUA CAUSANDO AGRAVIOS Y DESTRUYENDO LA ARMONIA Y EL RESPETO EN EL HOGAR.
Un corazón cargado de iniquidad hará que conciba pensamientos de la maldad continuamente y hablara de otras personas causan divisiones y ofensas como si tuvieran puñales en su boca. Son personas ofendidas que causan división, contienda y desanimo por donde quiera que van.
“Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es el” Proverbios 23.7
Nuestra lengua viene a ser el detector para saber lo que hay en nuestro corazón, y cuando expreso ese pensamiento que tengo en mi corazón, manifiesto y determino lo que soy.
“El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; PORQUÉ DE LA ABUNDANCIA DEL CORAZON HABLA LA BOCA”. Lucas 6.45
Una de las formas en que se manifiesta la iniquidad es a través de la lengua. Lo que hablamos determina muchas de las maldiciones o bendiciones que recibimos.
En Job 6: 30 dice: ¿Hay iniquidad en mi lengua?¿Acaso no puede mi paladar discernir las cosas inicuas?
La iniquidad sale del corazón a la lengua. Cuando no seremos libres en esta área, la iniquidad empieza a controlar nuestra lengua maldiciendo, criticando, juzgando, murmurando y hablando vulgaridades y cosas perversas.
“El pecado de Judá está escrito con cincel de hierro y con punta de diamante; esculpido está en la tabla de su corazón.” Jeremías 17.1
Las personas que han sido profundamente rechazadas o abusadas en su niñez, continuamente estarán atrayendo agravio sobre sus vidas, y de esta forma quedaran atrapadas en redes de iniquidad. Son víctimas de toda injusticia, como si tuvieran una marca imborrable que las persigue.
LA INIQUIDAD ES CAUSA DE INJUSTICIAS Y VIOLENCIA
La iniquidad entorpece y dilata los procesos civiles. Provoca que los fallos judiciales sean demorados y entorpecidos; y que los juicios no fallen según la verdad.
¿Por qué me haces ver iniquidad, y haces que vea violencia? Destrucción y violencia están dentro de mí, y pleito y contienda se levantan. Poe lo cual la ley es debilitada, y el juicio no sale según la verdad; por cuando el impío asedia al justo, por eso sale torcida la justicia. Habacuc 1.3 y 4
La iniquidad es una semilla que se arraiga en el corazón del hombre en forma de deseos perversos de violencia, abusos y humillaciones a personas indefensas; violándoles sus derechos y despojándoles de sus herencias.
“Mira al pacto, porque los lugares tenebrosos de la tierra están llenos de habitaciones de violencia.” Salmo 74.20
“Tierra de oscuridad lóbrega como sombra de muerte, sin orden, cuya luz es como densas tinieblas”. Job 10.22
De la misma manera que la iniquidad cava hoyos para atrapar las almas, también ciudades quedan atrapadas en esos pozos de violencia y corrección por causa de la iniquidad. Satanás establece estructuras de maldad que son territorios específicos en que tanto la tierra como los aires están totalmente impregnados de iniquidad.
¡Ay del que edifica una ciudad con sangre, y del que funda una ciudad con iniquidad! Habacuc 2.12
Existen ciudades enteras que han sido fundadas a través de congregaciones territoriales a dioses paganos. Construcciones con diseños masónicos, geométricas mágicas y horrendos sacrificios con derramamientos de sangre. Por eso es necesario que los justos hagamos justicia y que nuestra oración sana nuestra tierra.
LA INIQUIDAD PRODUCE SORDERA Y CEGUERA ESPIRITUAL
El plan de Dios fue diseñar el espíritu del hombre para que pudiera escuchar su voz.”Mis ovejas oyen mi voz y me siguen” Juan 10.4 y 27
“Vosotros tenéis la unción del Santo y no tenéis necesidad de que nadie os enseñe”. 1 de Juan 2.20
Tantos los profetas como los apóstoles experimentaban arrebatamientos, éxtasis, y visiones en lo que reciben la revelación de los diseños divinos espirituales.
“Vino a mi palabra de Jehová diciendo…”Ezequiel 21.1 “alce mis ojos y mire, y he aquí un varón que tenía en su mano un cordel de medir”. Zacarías 2.1
“Todavía un poco, y el mundo no me vera; mas vosotros me veréis; porque yo vivo, vosotros también viviréis”. Juan 14.19
Sin embargo, una gran cantidad de personas tienen el oído espiritual obstruido y no pueden oír la voz de Dios, por causa de capas de oscuridad que la iniquidad ha ido tejiendo por generaciones.
“Se apartaron los impíos desde la matriz; se descarriaron hablando mentira desde que nacieron. Veneno tienen como veneno de serpiente; son como el áspid sordo que cierra su pido, y que no oye la voz de los que encantan por más hábil que sea encantador”. Salmo 58. 3-5
Los que vinimos de un trasfondo religioso romano babilónico, debemos romper todo vinculo con la idolatría, la magia y el ocultismo.
“En los cuales el dios de este mundo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo el cual es la imagen de Dios”. 2 de Corintios 4.4
Muchos cristianos tienen dificultad para oír la voz de Dios y sentir su presencia, por causa de la iniquidad generacional en que sus familias se han involucrado con la idolatría.
La palabra dice que los ídolos “Tiene boca, mas no hablan; tienen ojos mas no ven; orejas mas no oyen; tienen narices mas no huelen; manos mas no palpan; tienen pies mas no andan”. Salmo 115.5-7
Cuando la palabra dice que tienen manos pero no palpan; las manos representan el ministerio y los pies representan la capacidad para ministrar y llevar a cabo la gran comisión. Los ídolos son ciegos, sordos y mudos, y la biblia dice que los que los adoran son: “Semejantes a ellos son los que los hacen, y cualquiera que confía en ellos.” Salmo 115.8
¿COMO SER LIBRES DE LA INIQUIDAD?
1. Debemos pedirle al Espíritu Santo que nos guie y nos envié un verdadero Espíritu de arrepentimiento y de valor para cambiar :
Espíritu Santo, hoy vengo a Ti, humillando a mi corazón, suplicando de Ti, que un verdadero Espíritu de arrepentimiento sobre mí. Abre mis ojos espirituales, para que pueda ver mi propia iniquidad. Dame tus dones y revelación, sueños y palabra de ciencia, para saber qué consecuencias a causa de la iniquidad de mis antepasados están aceptando mi vida; y están obstaculizando que se cumplan tus promesas y se establezca sobre mí la bendición.
2. Esperando que el Espíritu traiga convicción, memorias o revelaciones, tómese un momento y haga una lista de las áreas especificas en que la iniquidad ha estado afectando su familia.
3. Confronte y confiese esa iniquidad que le ha sido revelada. Lo más seguro es que usted haya cometido los mismos pecados que han cometido sus antepasados ya que esto va grabado en su propia herencia espiritual.
4. Justifique el derecho de su liberación creyendo a la palabra y recibiendo la obra de Jesús en la cruz del calvario.
“Él es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias” Salmo 103:3.
Vera el fruto de la aflicción de su alma, y quedara satisfecho; por su conocimiento justificara mi siervo justo a muchos, y llevara las iniquidades de ellos. Isaías 53:11
5. Una vez habiendo pedido perdón en forma específica por todo en lo que nos hayamos identificado, entonces debemos ordenar en el nombre de Jesús que sea desagarraigada toda la iniquidad de nuestro espíritu y de nuestra alma.
Luego debemos ordenar que la sustancia física que produjo la iniquidad y que se ha alojado en los huesos, órganos, y en mis entrañas salga inmediatamente de mi cuerpo.
6. Confesar que recibimos la liberación y que creyendo en Su palabra ahora somos “Libres en Cristo Jesús”.
“El se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda la maldad (iniquidad) y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras”. Tito 2:14
